Como se habrán podido dar cuenta, los polvitos ya intentan regresar poco a poco (vez como si sirven Blue?) y justo ayer tuve una plática de esas que hacen a uno pensar…

Últimamente he andado bastante agobiada por mi trabajo, en realidad no por lo que hago o dejo de hacer; sino por cómo me siento en él. Y ayer que platicaba con uno de mis maestros (mi papá jaja) me decía: gorda (ojo, no estoy, es de cariño) para que te agobias tanto si uno no sabe qué pasará mañana (igual y se acaba el mundo, igual y llega una ola gigante o igual y te ganas el Melate; por cierto, jueguen, está en 106 milloncitos, yo ya me ví!) disfruta lo que haya y lo que no, pues búscalo en otro lado, no es tan grave. Pero haaaaayyy como somos las mujeres (y creo también que algunos hombres) que nos ahogamos en un vaso de agua de vez en cuando.

Empezaré hoy por no agobiarme de más… a ver qué pasa!

Hoy que iba en el coche (entre llamada y llamada) pensaba en todo lo que puede suceder en una llamada telefónica…

Al uno contestar después de un sonido de alerta (que hoy hay cantidad) y decir “bueno” (la mayoría, conozco otros que dicen diga, aló, si?, etc.); infinidad de cosas pueden suceder. Podemos recibir noticias; entre estas están las buenas, malas, regulares, excelentes, etc. También podemos expresar sentimientos de todo tipo; desde un te quiero, te amo, te extraño hasta un no quiero saber más de ti o un enojo rotundo. Por otro lado también hay las que tienen que ver con los planes, citas, juntas, encuentros, etc. O simplemente descripciones de un día, un lugar, una cosa o un momento.

Hoy por ejemplo tuve muchas llamadas, según mi celular y hasta esta hora; 6:22 pm, llevo más de 50 (lo sé, no soy una persona normal ☺) y han habido consuelos, consultas, reclamos, pleitos, acuerdos de trabajo, peticiones, etc… y todavía me faltan como 5 horas para irme a dormir…

Eso es lo padre de un día; uno no sabe qué esperar! Lo que sí es que siempre son mejores las llamadas de los te quieros y te extraños que los pleitos o juntas de trabajo!

Osea, los si yo hubiera…

Creo que el mundo es como un libro de esos ochentenos de “Adivina tu aventura”. Cada página tenías la opción de decidir por varios caminos. Y cada camino te llevaba a una historia completamente diferente. Lo increíble era que si lo volvías a leer, encontrabas toda una nueva historia dentro de las mismas páginas. Así se eliminaba por momentos el “su yo hubiera”, porque en realidad podías escoger distinto y ver qué era lo que sucedía.

En la vida las cosas funcionan un poco distinto. Uno toma la opción y no es tan fácil regresar a la página anterior y rehacer la acción tomada. Pero eso sí, siempre es padre pensar en el que hubiera pasado si… Apoco no lo han hecho; yo, infinidad de veces, lo acostumbro hacer casi diario.

Ayer alguien me hizo un comentario de mi blog que no me cayó en gracia. Y no porque éste fuera descortés o imprudente; al contrario; sino porque me quería proteger. Pero tengo una capacidad muy reducida para la crítica y las ordenes. Es algo en lo que debo trabajar. Pero algo sí me hizo pensar; será que si cuando uno escribe aquí ya es del total dominio público; será peligroso? Ojala y no porque me gusta, creo que he llegado a intimar mucho con mi blog.