Todos en innumerables veces nos cuestionamos el qué queremos? Ya sea hacer, decir, soñar, etc. Pero pocas son las veces nos damos cuenta que probablemente hoy por hoy estamos viviendo algo de lo que algún día soñamos… por eso siempre queremos más y más.
Aunque de pronto me queje, creo que yo en muchas ocasiones soñé el tener un trabajo como el que tengo hoy, mi hermano muchas veces soñó en tener su propio negocio, la sra. que ayuda en mi casa soñó con algún día no tener marido, el de los chicles del semáforo soñó con vender poco a poco más chicles y de más sabores hasta un día tener un empleado y así… todos vamos soñando con lo que queremos y poco a poco lo vamos logrando.
Lo increíble sería si realmente nos diéramos cuanta de lo que vamos logrando en base a nuestros sueños pasados para poder ir agradeciendo, sonriendo o poniendo palomita en aquella interminable lista de “to do´s” para el futuro.
Así yo debería de estar contenta por desvelarme por la cantidad de trabajo, J. por tener tanta tarea los fines de semana, A. por firmar un contrato de 4 años de exclusividad con la empresa que le regalará la beca, J.C. por esperar en medio de Reforma a sacar fotos unas cuantas horas, M. por ya tener una sucursal en Polanco, J.P. porque se reduzca su presupuesto por contar con una nueva integrante, D. por vivir en una ciudad con menos inseguridad y contaminación, O. por ahora ser la cabeza más pedida en el mundo underground, P. por ahora estar mucho más cerca de su familia que cuando tenía trabajo, etc. etc. etc. etc.