Jimena es mi prima. Su vida no ha sido del todo fácil. Tuvo (tiene) una mamá grande, su papá se suicido ante sus ojos cuando ella tenía escasos 3 años, vivió en casa de mis abuelos sin tener ni siquiera su propio cuarto y fue hecha a un lado por muchos círculos sociales durante mucho tiempo por ser incomprendida. O al menos eso es lo que yo veo, habrá que investigar cómo vivió ella todo este tiempo.

Pero a Jimena alguna fuerza superior, muy superior, le otorgó un poder invaluable.

Tiene una percepción que va mucho más allá del sexto sentido; un toque que le permite ver, como ella dice, un “internet” del mundo como una visión. En muchos lugares, no sé si vulgarmente o no, a las personas que poseen este poder les llaman MEDIUMS. Personajes capaces de ver el “global” de la vida del otro y percibir el bien del mal y los hechos pasados. WOW!!!

Yo, al ser MEDIO (traté de subrayar pero no pude y por eso la mayuscula para hacer énfasis en el que soy no mucho ni más o menos ni poquito, sólo medio…) creyente, me cuesta trabajo no ser escéptica ante estas cuestiones; pero yo la he visto. De verdad tiene una capacidad impresionante. Es capáz de describir un lugar y a las personas dentro de él con tal exactitud que parece estar ahí; y nunca ha ido ni sabe dónde está. O incluso, acercarse contigo (con quién sea ja!), poner su mano en tu espalda y decirte: “no te angusties, ese problema en el que estás pensando se arreglará como tu quieres, sí, si le dices, todo se resolverá”. MADRES!!! Porque sí, en efecto, estaba yo pensando en un problema que tengo y ya había pensado en que la mejor solución era decirle a la persona. CHHHHHHHHHAAALE!!!

Ella dice que empieza a pensar en algo e información se aparece (como en Internet) ante su cabeza. Y lo mejor es que por medio de alguien como ella pero un poco más capacitado, preparado y que tiene más “asumido” su poder; sabe que le otorgaron su “poder” no para “leer” el futuro; sino para “sanar” al otro y así ayudar.

Que increíble misión. Y es que todos debemos de ayudar al otro, pero ayudar con ese poder de “handicap” está increíble.

Yo por el momento doy gracias de tenerla cerca, es alguien de quien uno puede aprender infinidad. Y hoy me dieron ganas de decirle que la quiero.

JIME, TE QUIERO, NO POR TU PODER SINO POR QUIEN ERES Y POR CÓMO ERES. Y POR TU PODER, TE ADMIRO. (ya puse el limón en mi bolsa!)